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Repudio de la FHyCS ante la violencia contra el pueblo Qom

  • Ana Victoria Espinoza
  • Humanidades y Ciencias Sociales

Las carreras de Antropología Social y Comunicación Social de la Facultad de Humanidades y Ciencias Sociales (FHCyS) de la UNaM se pronunciaron ante el hecho de violencia institucional contra el pueblo Qom, ocurrido en la provincia de Chaco.

Desde el Departamento de Antropología Social de la Universidad Nacional de Misiones repudiamos con preocupación los hechos de violencia racista perpetrados en la madrugada del día 31 de Mayo, por parte de efectivos policiales contra pobladores Qom del barrio Banderas Argentinas de la localidad Fontana Provincia de Chaco.
Hacemos un llamado urgente a la intervención de las autoridades competentes, así como al respeto de los derechos de las comunidades originarias en todo el territorio nacional donde estas desarrollen sus vidas.
Estos hechos reflejan evidentemente en nuestra sociedad mecanismos históricos de opresión vinculados a la colonialidad como son el racismo, el clasismo, el sexismo, entre otros, que afectan no sólo a personas pertenecientes a comunidades indígenas y afrodescendientes, sino a la sociedad en su conjunto, despojándola, a través de prejuicios y otros mecanismos de exclusión, de sus visiones de mundo, de sus lenguas y conocimientos, de su relación con el ambiente y de sus formas de resolución de conflictos, lo que empobrece y afecta a la calidad democrática.
Creemos que sólo con la reflexión permanente y explicita de estos procesos, acompañando las luchas históricas y situadas que las propias comunidades realizan, y exigiendo una efectiva aplicación de políticas públicas en sintonía, podremos construir presentes donde todas las identidades puedan desarrollarse plenamente en nuestro país hacia el futuro.

Desde el Departamento de Comunicación Social de la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Universidad Nacional de Misiones (FHCyS-UNaM), denunciamos y repudiamos públicamente los hechos, inadmisibles, de violencia institucional extrema padecidos por jóvenes de la Comunidad Qom, en el barrio Bandera Argentina de la localidad de Fontana, provincia de Chaco,durante este fin de semana.
Constatamos que, este tipo de procedimientos, se ampara en formas de impunidad explícitas que dan cuenta del desprecio hacia las personas que forman parte de los pueblos indígenas, soslayando sus derechos sociales y, por consiguiente, negándoles su estatuto humano.
Este tipo de acciones por parte de las fuerzas de seguridad no se dan de manera aislada, sino que dan cuenta de un anclaje histórico-político y cultural naturalizado y fundado en expresiones de odio hacia las alteridades y hacia la diversidad constitutiva de nuestros pueblos. En este sentido, las diferencias étnicas, de género y de clase son concebidas en clave selectiva y negativa y se empalman con el legado perverso del terrorismo de Estado: su matriz represiva y amedrentadora.
En suma, este tipo de formas del desprecio hacia la condición humana son inadmisibles en un contexto tan difícil, donde la lógica y el accionar de las fuerzas de seguridad deberían ser, por el contrario, la vocación de servicio proclive a bregar por el cuidado de nuestros congéneres y nuestros pueblos.
Nos preocupa este tipo de experiencias y situaciones, en el consentimiento de que vemos que se replican, con sus matices, en distintos puntos del país y mayormente, hacia los sectores populares, indígenas y no indígenas.
Exhortamos a que las autoridades del Gobierno de la Provincia del Chaco, por una parte, tome las medidas correspondientes para que estas prácticas y sus perpetradores directos sean investigadas y sancionadas de acuerdo a la legislación en materia de DDHH; y, en otro orden, y al mismo tiempo, se lleve calma y justicia a las y los jóvenes violentados y vejados y a sus familias.

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